Back to Top

contacto@nuestrarevista.com.mx

headerfacebook headertwitter
 

Zoomestre

Rubén Aguilar Valenzuela 
Esta semana terminé los dos cursos que imparto en la Universidad Iberoamericana. En la carrera de Ciencia Política doy Sociedad civil y grupos de interés y en la de Comunicación, Comunicación gubernamental.

Una de las alumnas en su reflexión final sobre el curso ha llamado a estas semanas el Zoomestre. Los profesores y los alumnos tuvimos que cambiar la manera de abordar las clases a partir de la suspensión de éstas en el espacio físico de la universidad.

En mi caso, para seguir dando las clases utilicé el chat en Whatsapp y las sesiones en Zoom. Los dos mecanismos de entrada permitieron una relación más horizontal y diría también que más cercana.

Me conectaba desde mi estudio y las y los alumnos de diversos lugares de sus casas; la sala, el comedor, el jardín y también sus cuartos. La vestimenta era más informal y relajada.

Las exigencias escolares planteadas al inicio del curso nunca cambiaron, pero sí la forma de dar y recibir las clases. Muchos otros profesores y alumnos han vivido lo mismo en este Zoomestre.

Comparto algunos comentarios de las y los alumnos, que tienen entre 21 y 23 años, sobre esta experiencia inédita. Es un elemento más, entre otros muchos, que pone de relieve los cambios de hábitos provocados por la pandemia y el papel de las nuevas tecnologías. Son citas textuales:

"A pesar de que la modalidad presencial se suspendió, no sentí que dejara de aprender por ya no estar en el salón. Discutiendo los artículos y noticias vía Whatsapp, conectándonos por Zoom y seguimos el curso (...)"

"El Covid-19 llegó y puso en pausa esta dinámica de grupo (clases presenciales) lo cual me entristeció mucho para ser honesta. No esperaba terminar el semestre de esta forma. Sin duda fue mucho más difícil seguirles el ritmo a las lecturas, los reportes (...) porque para mí era mucho más difícil concentrarme en mi casa".

"Aunque el Covid-19 nos obligó a cambiar de un día para otro la forma en la que se hacen las cosas me parece que la universidad logró manejarlo bien".

"El aprendizaje en línea (...) me ha obligado a ser todavía más estructurada y disciplinada, y ser más participativa en clase para mantener siempre arriba mis niveles de interés. Creo que para que esta modalidad se lleve a cabo con éxito es necesario que las dos partes pongan más esfuerzo".

"Desafortunadamente el Covid-19 impidió que continuáramos al curso cómo lo veníamos haciendo de manera presencial, afortunadamente existen otras maneras de poder seguir aprendiendo".

"A pesar de la pandemia el curso fue muy fructífero, ya que se mantuvo la comunicación gracias a los diferentes artefactos que la tecnología nos ofrece".

"Sin embargo desgraciadamente por el Covid-19 en marzo mis compañeros y yo tuvimos que dejar de asistir al curso de manera presencial y nos vimos forzados a terminar el semestre en línea (...) que se llevó de manera exitosa y enriquecedora (...)".

Pandemia, charlatanes y autoritarismo

Rubén Aguilar Valenzuela 
"Esta es una época de oro, para los charlatanes" afirma Moisés Naím (Líbano, 1952), que por catorces años (1996-2010) fue director de la prestigiada revista Foreign Policy, en entrevista con Hugo Alconada, de La Nación de Buenos Aires, que reproduce El Universal (17.04.20).

Naím, nacionalizado venezolano, se pregunta ¿cómo es posible que les crean a estos charlatanes totales? y añade que para sus seguidores lo que dicen "no tiene que ver con evidencias, con la verdad, sin consentimientos muy fuertes de afiliación con esos charlatanes" y se muestra sorprendido de que, "muchos de esos seguidores son gente sofisticada, informada, viajada y leída".

Quien fuera Director del Banco Central de Venezuela y Director Ejecutivo del Banco Mundial se dice preocupado por el "desprecio de los hechos, de la ciencia, de los expertos que ha demostrado el populismo con su supuesta lucha en defensa del pueblo en teoría maltratado por los expertos".

El autor de El fin del poder (2013) plantea, con relación a la pandemia, su "miedo de que este tipo de eventos aumente la propensión al autoritarismo. A raíz de esto pueden darse repuestas autocríticas, dictatoriales y conculcarse los derechos civiles de la gente".

Y asegura es necesario "proteger a la democracia en circunstancias en que la gente desesperada, ansiosa, preocupada y asustada está dispuesta a hacer concesiones a sus derechos, a las libertades políticas propias de una democracia. Y puede haber gobiernos que caigan en las grandes tentaciones de aprovecharse de eso miedos en momentos en que el proteccionismo puede matar".
 
La columna de Naím para El País de España, también se publica en Francia, Italia y en periódicos de América Latina. Afirma que "el virus no respeta fronteras de ningún tipo. Es un virus altamente globalizado. Por eso está bien que el virus esté siendo atacado de manera local en cada ciudad y cada país, pero hay una parte económica que necesita coordinación global".

Los líderes del mundo hablan de manera preocupada "acerca de la crisis económica y de la necesidad de reanimar las economías, de inyectarles liquidez, de impedir que haya grandes bancarrotas de empresas, que el desempleo no llegue a niveles estratosféricos (...) y cabe la esperanza de que es preocupación, es miedo, los impulse a tomar decisiones, a trabajar coordinadamente", dice quien en 2011 recibió el Premio Ortega y Gasset.

En la visión de Naím, al presidente López Obrador "le va a afectar mucho la crisis económica de su país, con una política bastante agresiva contra el sector privado y la manera en la que ha enfrentado la pandemia. Eso lo pagará políticamente en términos de popularidad".

Diálogo por la Reconstrucción Nacional

Rubén Aguilar Valenzuela
El pasado 23 de abril, Futuro 21, organización ciudadana plural que reúne a intelectuales, académicos, líderes sociales, dirigentes de organizaciones de la sociedad civil, empresarios y políticos, convocó al "Diálogo por la Reconstrucción Nacional" a través, en tiempos de pandemia, de las redes sociales.

En el evento participaron gobernadores, legisladores, presidentes de partidos, representantes de organismos empresariales, líderes sindicales, intelectuales, académicos y dirigentes de organizaciones de la sociedad civil que expusieron su visión del país y compartieron sus ideas de cómo hacer frente a las crisis que hoy están presentes.

A partir de las distintas intervenciones se reconoce que el país vive al mismo tiempo cinco crisis: la pandemia sanitaria, la recesión económica, la creciente violencia, el problema social y el problema político. Y que de no tomarse las medidas adecuadas y a tiempo éstas se van a profundizar y pueden generar un escenario no visto en la historia moderna del país.

Hay acuerdo, desde muy diversas posiciones políticas e ideológicas, sobre los problemas que ahora aquejan al país y también sobre las medidas que, en la actual emergencia nacional, se deben tomar, para solucionarlos. Del diálogo surgieron muchas propuestas y en la visión de Futuro XXI estas son las más importantes:

1. Posponer, durante este año, los proyectos del aeropuerto de Santa Lucía, la refinería Dos Bocas y el Tren Maya, con el propósito de obtener recursos para atender los efectos de las crisis.
2. Canalizar recursos adicionales y suficientes al sector salud.
3. Canalizar recursos extraordinarios y suficientes a los estados para atender la pandemia y la recuperación económica.
4. Establecer un ingreso básico universal y de protección al empleo financiado entre gobierno y sector privado.
5. Posponer durante seis meses el pago de impuestos, servicios públicos y costos de seguridad social.
6. Aplicar un programa anticíclico de reactivación económica a través de mayor inversión y gasto públicos.
7. Convocar a un Consejo Económico y a una Convención Fiscal de emergencia, para enfrentar la crisis y elaborar un Programa de Desarrollo Económico y Social a largo plazo.
8. Recuperar la autonomía del Poder Legislativo, asegurando que asuma plenamente su papel constitucional de contrapeso con facultades plenas, para aprobar las políticas necesarias para salir de las crisis que México enfrenta.

Las y los integrantes de Futuro XXI están convencidos, como otras muchas ciudadanas y ciudadanos, que la dimensión de las cinco crisis simultáneas que hoy vive el país requieren de un acuerdo nacional que reúna a los actores que integran el Estado: el gobierno, la empresa y la sociedad civil. Para eso es necesario que el presidente abandone su política de polarización y confrontación con todos los que no piensan como él. ¿Estará a la altura de los tiempos? ¿Podrá comportarse como el hombre de Estado que requiere el país? Ya se verá y la historia juzgará.

De Marina de Tavira a Luis de Tavira 

Rubén Aguilar Valenzuela
En estos tiempos de pandemia y encierro les comparto el texto que la actriz Marina de Tavira pronunció el día que, a Luis de Tavira, su tío y maestro, le otorgaron el Premio Bellas Artes de Teatro 2019. La intervención de Marina sintetiza el aporte de Luis al teatro y a las artes de México en su condición de dramaturgo y de formador de actores y actrices. Y al hablar de Luis habla también de ella. En el proyecto de Casa del Teatro, del Centro de Formación Teatral San Cayetano, en el Estado de México, la tuve de alumna en un curso sobre la economía del arte. Con Luis tengo una amistad entrañable de muchos años. Reproduzco el texto que nunca antes se ha publicado.

Cuando tenía seis años me llevaron al teatro. La obra se llamaba La Honesta persona de Sheshuan de Bertolt Brecht y la dirigía Luis de Tavira. Ese día no sólo sucumbí al asombro del teatro, también supe que, a ese extraño mundo, poderoso, indescriptible quería dedicar mis días. Pero no sólo al teatro a ese teatro. Más tarde, como suele decir Luis, entendí lo que quería decir: si todo es teatro nada es teatro. En ese momento solo supe, aunque no pudiera todavía verbalizarlo, que aquello que sucedía ante mis ojos no sólo era bello, sino que también apelaba a aquello único que puede trasformar la realidad: la producción de la conciencia.

Ese era el teatro que hacía Luis de Tavira, ese es el teatro que hace Luis de Tavira. Después cuando pude hacerme cargo de mi deseo tuve el privilegio de sentarme en el aula, de pararme en el escenario y de generar proyectos colectivos de la mano de Luis de Tavira. Puedo decir hoy a nombre de muchos de mi generación y de otras generaciones que si hay algo que nunca muere en Luis es la profunda convicción y la esperanza de que el teatro puede hacernos mejores personas y por lo tanto generar la posibilidad de un mejor mundo para todas y para todos. Incansable hasta el extremo Luis nunca dejará de insistir en que la función más importante es la de hoy por la única e irrefutable razón de que es la de hoy. El arte del presente de la presencia, de la comparecencia viva del actor y del espectador entre quienes sucede eso que sólo puede suceder esa única vez y que siempre será distinto: esa verdad sólo reservada al teatro, esa revelación, ese reconocimiento, esa vivencia: esa experiencia estética capaz de generar una interlocución con lo otro, con el enigma de la existencia.

He escuchado a muchos actores decir y, lo comparto, que si hay algo que logra inyectar Luis de Tavira en el proceso creativo es la pasión y ¿qué es la pasión sino ese querer darlo todo, serlo todo? Afirmarte en la convicción de que es ahí donde hay que estar, de que eso es lo que hay que decir. Que dotar de sentido la palabra viva que es el actor "esa palabra hecha carne" dota de sentido la vida misma. El teatro como el arte de la defensa de la vida. Y aquí no son mis palabras las que suenan sino las palabras que he hecho mías a través de los años de colaboración teatral y de ser testigo de que esas palabras son el testimonio de una vida, de muchísimas "horas nalga" como él dice, de días y días y días y noches y noches y noches, de trabajo, trabajo, trabajo, de ensayos, clases, noches en vela de escribir, de pensar "porque el pensar es todas las veces del pensar", de juntas, de citas institucionales, de giras, de funciones, todo siempre cargado de la convicción de que mientras exista el teatro aún tenemos esperanza.

Me tocó vivir con él el proyecto de Casa del Teatro, del Centro de Formación Teatral San Cayetano y del Centro Dramático de Michoacán. Pero antes existió el Centro Universitario de Teatro, el Centro de Experimentación Teatral, el taller de teatro épico, el Núcleo de Estudios Teatrales, y más recientemente la reformulación de la Compañía Nacional de Teatro. Se me escapa mucho. Pero esta sola lista confirma el largo aliento de una vida entregada al arte, a la formación artística, al discurso teatral de un país.

Si una palabra me nace hoy decir es GRACIAS. Gracias porque si algo he entendido en todos estos años es que no se puede renunciar, no se puede renunciar a dar todos los días la mejor función de tu vida aun cuando solo esté sentado un espectador en la sala porque si se da el milagro de que ocurra ese misterio único del teatro entonces esa función habrá valido la pena. Gracias por enseñarme que la competencia es siempre conmigo misma, que se trata de alcanzar a ser eso único que cada uno podemos llegar a ser. Gracias por enseñarme que mi mayor maestra siempre será mi personaje y que es en ella donde podré entender un poco de mí misma. Gracias porque no das tregua. Porque cuando se trata del teatro, entendiendo que es un medio para un fin aún mayor, eres exigente hasta el extremo empezando por ti mismo. Gracias por enseñarme lo grande de lo pequeño, lo pequeño de lo grande. A asombrarme de la antigua Novedad de la Patria, a estremecerme ante El Martirio de Morelos, a querer descubrir los secretos de Clotilde en su casa, a perderme en el laberinto de las Siete moradas, a sucumbir ante el amor de El Caballero de Olmedo, al intercambio luminoso de Leoncio Lena, a dejarme llevar por una Guía de turistas, a asombrarme de esta tierra cuál Cortez, a temblar ante la profecía de Zaratustra, a temer el arco de las amazonas, a enternecerme ante el posible aniversario número 75, a querer llegar a la raíz de la epiqueya, y la desoladora vacuidad de Los ejecutivos. A Zozobrar con La expulsión, a querer ser parte de La Conspiración de la Cucaña, de la procesión de María Santísima, de la bondad enigmática de Un Círculo de cal, de la sabiduría escondida detrás de una Dama boba, gracias por el universo contenido en una piedra, por el horror del matadero, por el implacable juicio a aquel Felipe Ángeles, por las artimañas de Los pequeños zorros, por la nostalgia de Dios de algún Rehén, por la sorpresa que aguarda tras las puertas, por el dolor de un Tragaluz. Por todo lo que se me escapa por no saber cómo nombrarlo. Porque también me enseñaste que las cosas son cuando alcanzan a ser dichas y por eso hoy yo digo gracias. Gracias por el teatro.

Pienso en ti como ese niño entre nueve hermanos que jugaban al teatro y a las películas por no tener televisión. Que escribían obras, se peleaban los personajes o quien sería el director. Una infancia en donde constantemente se retaba a la inteligencia y a la supervivencia. Pienso en ti en la Compañía de Jesús el lugar del principio y fundamento y donde estudiando griego apareció Sófocles cambiando el curso de las cosas para siempre. Pienso en ti encontrando el axis en el teatro para quedarte ahí y reunir toda la convulsión, la sabiduría, y la alegría de la experiencia de la vida para hacer visible lo invisible.

Director, dramaturgo, maestro, productor, pensador, actor: Hacedor de teatro. ¿Desde cuántos lugares se puede amar el teatro? ¿Desde cuántos lugares se puede amar la vida?

Me entusiasma el camino que se viene por delante, todas las cosas que abrirás todavía para que se siga asomando el mundo. Estaré siempre anhelante confiando que nacerá en ti una nueva poiesis que nos confirme que hay suficiente luz en las tinieblas.

Y no puedo dejar aquí de recordar esas palabras que pusiste en boca de tu Director de teatro en la escena 7 (ese número siete que siempre se repite)

Quien pierde al teatro
Pierde su espejo;
Alguien dirá que hay muchos otros
Y es verdad,
Pero no habría que olvidar
que ninguno es como el teatro

Dónde sino mira el mundo
el abuso de la estupidez.

Quién puede revelar mejor
la trama con que se urden los engaños.

Quien puede decir mejor
que el tirano es un tirano
el traidor un homicida
el banquero un usureo
el millonario un avaro
Y el zalamero un ladrón.

Da su enseñanza mayor sin decirla,
Cuando al mover a risa y llanto,
hace aparecer aquí
en el instante que dura
las grandes almas que la muerte ausenta.


Muchas gracias. 

Museo Arqueológico de Chania

Rubén Aguilar

Chania, Creta

Grecia 

 

Historia

En un inicio la colección arqueológica estuvo albergada en varios edificios públicos, como una residencia, un instituto masculino de enseñanza, y en la Mezquita Hassan. En 1962 se trasladó al monasterio veneciano de San Francisco. En 2015 se terminó un nuevo museo. Ahora está en la etapa de preparación. Se espera inaugurarlo en 2021. Es obra del arquitecto Teofanis Bobotis.

Edificio

Está en la iglesia del convento de San Francisco, que fue de los franciscanos. Es una construcción original del siglo XIV o XV. Tiene planta basilical de tres naves. Durante la ocupación otomana fue mezquita, a la que Yussuf Pasha, el conquistador de la ciudad, le puso su nombre. En el siglo XX fue sede del cine Idaion Andron y después de la Segunda Guerra Mundial sirvió como almacén para equipamiento militar, hasta que en 1962 se destina para albergar el museo.

Colección

 

El museo contiene una colección de objetos del neolítico, de la civilización minoica y de periodos históricos posteriores, hasta la época romana. Las piezas son fruto de las excavaciones en la ciudad, en torno a ella y del área circundante. Hay piezas de las antiguas ciudades de Cidonia, Idramia, Áptera, Polirrenia, Císamo, Éliro, Hirtacina, Syia y Liso, y también de Axos y Lappa en él área de Rétina.

El museo se enriqueció significativamente tras la donación de la colección particular de Konstantinos, Marikas y Kyriakos Mitsotakis en el año 2000. Esta colección comprende objetos de todos los periodos históricos, entre los que abundan los de procedencia minoica. También hay una colección de monedas de Creta que fue donada al museo en 2008.

  • Prehistoria

Hay fragmentos de piezas de céramica del 3400 al 2900 a.C. Y también piezas de barro del 2900 al 2000 a.C. De finales el período neolítico hay recipientes de la pequeña isla de Gavdos. Se exponen también hallazgos de diferentes cuevas que abarcan el período comprendido entre el neolítico y el final de la Edad del Bronce.

  • Cultura minóica     

Hay importantes piezas de la época minóica que florece precisamete en la Isla de Creta, que van de 2800 al 1450 a.C. Destacan los objetos que proceden de Nerokuros. Hay un sello de arcilla de Kasteli con la representación de una ciudad minoica y su deidad local, datado en la segunda mitad del siglo XV a.C.

 

Sello Katelki / 1450 a.C.

Entre 1375 y 1200 a.C. en la ciudad se produjo cerámica de alta calidad, producto que se extendió por todo el Mediterráneo. Son dignas de mención una tablilla de arcilla con caracteres en Lineal A hallada en Kasteli y fechada en 1450 a.C.; y otras tablillas más pequeñas con textos en Lineal B de hacia 1300 a.C. también de Kasteli. Se exhibe un lárnax (sarcófago de barro cocido o adobe de pequeño tamaño, usado en la Antigua Grecia como caja o cofre de cenizas) del Minoico Tardío III del barrio de Guves, en La Canea, fechado en torno a 1300–1200 a.C. y otros lárnax procedentes de la necrópolis minoica de Armeni.

  • Época geométrica (siglos XI-VIII a. C.)

Hay piezas notabeles de este período.

  • Época arcaica (VIII-VI a.C.)

Se exhiben una serie de objetos procedentes de tumbas del área. Destaca un friso.

  • Época  clásica (VI-Iv a.C.)

Hay buenas esculturas.

  • Época helenística

Hay buenas piezas. Son pocas. 

  • Época romana

 

Hay buenas piezas. Destaca un mosaico romano con las figuras de Dioniso y de Ariadna y un busto del emperador Adriano, encontrado en un santuario. Estupendas piezas de vidirio.

Comentario

Es un museo de medianas dimensiones con piezas notables. Otros hallazgos de diversos periodos históricos de excavaciones de la ciudad de La Canea incluyen recipientes de cerámica, estatuillas femeninas y joyas de oro. Hay también hallazgos del cementerio de Áptera y ofrendas votivas del santuario de Asclepio ubicado en la antigua ciudad de Liso y del templo de Poseidón de Tsiskianá. En 2021 se traslada al nuevo efificio.

 

Página 128 de 155