Back to Top

contacto@nuestrarevista.com.mx

headerfacebook headertwitter
 

La ratificación de mandato como estrategia de propaganda política

Rubén Aguilar Valenzuela
Desde un inicio el presidente y los suyos consideraron que la ley que establecía la revocación de mandato, para sus intereses, debería entenderse como de ratificación de mandato.

Siempre se planteó como un pretexto para realizar un ejercicio de propaganda política a la mitad del gobierno del presidente, con el propósito de tres cosas:

- Satisfacer el ego y la vanidad del presidente. Para él es vital poder decir que el pueblo lo quiere y aclama. Que si se fuera posible lo reelegiría permanentemente.

- Blindarse ante el fracaso de su gestión. A tres años de gobierno solo hay malos datos entre otros que: el país no crece, aumenta la pobreza, la violencia no cede, la corrupción continúa y el país se militariza. Se quiere poner al centro al presidente y provocar una reacción emocional de apoyo a su mandato. Una que no tenga relación con el resultado de la acción, sino que el pueblo bueno solo vea al líder con quien se identifica.

- Fortalecer la imagen de Morena a través de hacer crecer la del presidente. En la elección de 2024 el presidente no estará en la boleta. El presidente es el gran capital de Morena y de su candidato a la presidencia. La intención es trasladar la imagen de un presidente querido por el pueblo bueno a Morena y su candidato.

El éxito de los propósitos tiene relación directa con el número de los participantes en el evento del 10 de abril. Eso lo sabe el presidente y los suyos. Conocen las encuestas y son conscientes de quienes se presenten a votar lo van a hacer por la ratificación del mandato. Así es desde el origen.

El ejercicio no lo solicitó la ciudadanía inconforme con la gestión del presidente, para que éste dejara su cargo. Lo pidió el mismo presidente como estrategia de propaganda política. Se sabe por diversos sondeos, ellos los encargan, que el número de participantes no se va a dar en los términos que imaginaron.

La violación de la Constitución y la Ley de Revocación de Mandato por parte del presidente y de los suyos, ahora también del Ejército, ha estado presente todos los días a partir de que arrancó el proceso. El domingo tres de abril, a una semana de la votación, se radicalizó, de manera abierta y cínica, la propaganda con recursos públicos, para invitar a los simpatizantes del presidente a que vayan a votar por su permanencia.

El del próximo domingo es un ejercicio vil de propaganda política centrada en afirmar al presidente. Se invita a las personas a que lo vuelvan a votar. Es un evento muy semejante al que en 2008 promovió el presidente boliviano Evo Morales, para ser confirmado en el cargo. El mecanismo de revocación de mandato no se ha diseñado, en los países donde existe, para ratificar al presidente en funciones. Su propósito es otro.

Faltan dos días para saber el resultado de este evento de ratificación del mandato. Su éxito, en razón de sus propósitos, se mide por el número de millones de personas que vayan a votar. El padrón electoral tiene 94 millones. En 2018, el presidente ganó con 30 millones. Son números a tener en cuenta que para medir los buenos o malos resultados. Si se presentan menos de 30 millones será un fracaso. Y la dimensión del mismo se relaciona con cuántos abajo de esa cantidad.

Propaganda de Estado

Rubén Aguilar Valenzuela

El pasado domingo dos de abril marca un hito en la historia moderna del país. Ese día el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, el presidente de Morena, Mario Delgado, con el apoyo y compañía del comandante de la Guardia Nacional (GN), general Luis Rodríguez Bucio, con absoluto cinismo se dedicaron a violar la Constitución.

Lo hicieron de manera pública, sin ningún recato, y también de forma abierta se rieron de ella. En un estilo socarrón e hiriente hicieron patente, más que en ninguna otra vez en lo que va del sexenio, que la Constitución y las leyes literalmente les vale madre.

Ellos se ponen por encima de la Constitución y de las y los mexicanos que desde su promulgación, en 1917, han dado su vida por ella. La Revolución Mexicana se condensa en la Carta Magna. Ellos, también el presidente, se la pasan por el arco del triunfo. Dan un salto atrás a la vida democrática.

Simultánea a la veda electoral que establece la Ley en la revocación de mandato, que el presidente y los suyos, lo proponen como de ratificación de mandato, inicia una gigantesca campaña de propaganda de Estado, que invita a que se vaya a "votar" para que "permanezca" López Obrador.

El presidente empieza a violar de manera consciente y sistemática la Constitución el día mismo que inicia la veda electoral. La mañanera se convierte en el instrumento fundamental de propaganda del evento del 10 de abril.

Después vienen los espectaculares que se ponen en todo el país, las declaraciones de gobernadores de Morena, de funcionarios del gobierno federal. Desde el primer día se ha hecho evidente el uso de los recursos públicos en la promoción del evento de ratificación de mandato.

El presidente y los suyos se burlan de los señalamientos del INE y el TEPJF. El titular del Ejecutivo a cada llamada de atención arremete contra ellos. Toda institución debe estar sometida a su voluntad. En su gobierno no pueden existir órganos autónomos.

La propaganda de Estado que promueve al presidente, es quien la dirige, tiene claros rasgos de culto a su personalidad, se trata de satisfacer su ego y vanidad. En ella hay elementos de carácter fascista.

Así ha sido desde hace semanas, pero el domingo pasado escaló a niveles que antes no se habían dado. No solo se trató de una jornada nacional con el apoyo de los gobernadores afines al gobierno y de Morena en estados donde no gobiernan.

Lo nuevo, lo muy preocupante, es que el domingo, el secretario de Gobernación, en compañía del Ejército, se dedicó a hacer propaganda de Estado, con recursos del Estado, donde dejó en claro que el gobierno puede violar la Constitución cada vez que le venga en gana.

Y todavía más grave, se entendió que esa también es la postura del Ejército con la presencia del comandante de la GN que de manera abierta también violó la Constitución. El general secretario no se pronunció, para descalificar a su subalterno. Se asume, entonces, que también es parte de la estrategia de propaganda.

¿Qué sigue después del domingo? El país y la democracia en México vive tiempos obscuros. Tiempos que se pensó ya nunca más volverían. No es así. Hemos regresado al pasado autoritario y estatista. La vida democrática está en peligro. Toca a la ciudadanía defenderla.

Zona arqueológica de Xochicalco. Museo de sitio

Rubén Aguilar Valenzuela

Zona arqueológica de Xochicalco
Xochicalco, Morelos

        
Edificio
 
En 1993 inicia el proyecto que es diseño del arquitecto Rolando J. Dada Lemus. Está considerado como el primer museo ecológico del mundo. Tiene iluminación natural, que a través de unos prismas se difunde en las salas. Celdas fotovoltaicas transforman la luz solar en electricidad. Hay un sistema para recolectar el agua de lluvia y se tratan las aguas negras, para regar los jardines. El museo se inaugura en 1996.

Colección

Todas las piezas que se exhiben provienen de las excavaciones en el sitio. Hay seis salas que se ordenan en ocho temáticas: 1) Territorio; 2) Recursos naturales; 3) Relaciones de intercambio; 4) Organización social; 5) La religión y los dioses; 6) La ciudad y su arquitectura; 7) Instrumentos de trabajo; 8) Espacio cotidiano.

Comentario

En 1999, el sitio es declarado Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. En el vestíbulo hay un gran ventanal que permite una visión panorámica de la zona arqueológica.

Y dos maquetas: una prehispánica (1000 d.C.) y una que reconstruye la ciudad en su entorno. A la salida del museo hay una calzada de piedra que conduce a la zona arqueológica.

La dimensión del museo y el número de las piezas, permiten una visita donde se puede contemplar todo con atención y cuidado. La museografía es buena y también didáctica. Las instalaciones se conserven bien.

Esta debe ser la visita siete u ocho que hago al museo y siempre me quedo con una buena impresión. El Señor de Rojo es la pieza estrella. Hay elementos decorativos de los edificios (estrellas, caracoles, cabezas humanas ...) que siempre me llaman la atención.

¿Ejército golpista?

Rubén Aguilar Valenzuela
El general secretario, Luis Crescencio Sandoval González, sabe muy bien que los soldados han jurado cumplir la Constitución y también defenderla. Es parte de la doctrina militar. Sabe también, por eso mismo, que su fidelidad es a la Carta Magna y al comandante en jefe solo si éste la respeta.
 
La Constitución y la Ley de Revocación de Mandato señalan con claridad que en la veda electoral solo el INE puede publicitar este evento. Ante el albazo legislativo que intentó Morena, el TEPJF determinó con claridad que era improcedente porque violaba la Constitución.
 
El general secretario, hombre informado como pocos de lo que sucede en el país, conocen bien la Constitución, las leyes reglamentarias y también las resoluciones que tome el INE y el TEPJF en el marco de la Carta Magna.
 
La Guardia Nacional (GN), integrantes y equipos, es parte del Ejército y como tal sujeta a las mismas normas y disciplina. Sobre eso no hay duda. No ha lugar a la interpretación.
 
El pasado domingo, el comandante de este cuerpo del Ejército, general Luis Rodríguez Bucio, violó abiertamente la Constitución que juró cumplir al hacerse presente en Torreón, Coahuila, en un acto de Morena en apoyo al evento del 10 de abril, planteado por el presidente, su gobierno y su partido como ratificación de su mandato. Un hecho a todas luces ilegal.
 
Al comandante Rodríguez Bucio, lo acompañaba el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, y el presidente de Morena, Mario Delgado. El viaje lo hicieron en un avión de la GN y luego estos, en la misma nave, viajaron a Hermosillo, Sonora, a otro evento ilegal de promoción del voto el 10 de abril.
 
¿El general secretario va a permitir que en su cara un subordinado violente las normas del Ejército, viole la Constitución, supongo que a título personal, y utilice instrumentos del Ejército para apoyar a que civiles también lo hagan?.
 
¿Qué piensan los generales en activo y en retiro del comandante de la GN y de la permisividad del general secretario? ¿Ustedes apoyan que se viole la Constitución que juraron cumplir y defender?
 
¿La nueva doctrina militar privilegia la obediencia a ciegas de lo que ordena el comandante en jefe, aunque viole flagrantemente la Constitución y las leyes que de ella emanan?
 
¿El general secretario nada tiene que decir de la actitud del general Rodríguez Bucio y del uso de equipo de la GN en apoyo a un evento partidario? Esto nunca sucedió ni en los años del priismo más abusivo y autoritario. El Ejército siempre mantuvo su distancia.
 
¿General secretario usted no va ordena se haga un juicio al comandante de la GN por violar un juramento y la disciplina del Ejército? ¿Usted va a ser su cómplice? Los generales secretarios que lo precedieron nunca hubieran permitido lo que ahora vemos. ¿Usted sí?

El conflicto histórico entre las iglesias ortodoxas de Rusia y Ucrania

Rubén Aguilar Valenzuela
El cristianismo llega a Rusia y Ucrania hacia el siglo IV, pero es en el siglo IX cuando se empieza a expandir. En 988 Vladimiro I de Kiev se bautiza y adopta la religión del Imperio bizantino como la oficial del reino de la Rus de Kiev. En 1988, la Iglesia ortodoxa rusa, también la de Ucrania, celebró su primer milenio.
 
Por siglos la Iglesia ortodoxa rusa fue parte del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla. Los obispos eran consagrados por el Patriarca ecuménico. En 1448, la Iglesia ortodoxa rusa se declara como autónoma de Constantinopla, pero es hasta 1589, que el Patriarcado de Constantinopla reconoce oficialmente la autocefalía de la Iglesia ortodoxa rusa.
 
En 1686, la Iglesia ortodoxa rusa anexiona a la Iglesia ortodoxa de Ucrania. En 1919, después de 233 años, la Iglesia ortodoxa de Ucrania se declara autónoma del Patriarcado de Moscú. La incorporación de Ucrania a la URSS da al traste con esta decisión. En 1991, tras la independencia de Ucrania, el Patriarcado de Kiev proclama su independencia de la Iglesia ortodoxa rusa.
 
El Patriarcado de Moscú aplica la excomunión y expulsión de los obispos que pertenecen al Patriarcado de Kiev en 1997. Declara que la Iglesia ortodoxa de Ucrania rompe con la Sucesión Apostólica. En 2004, el Santo Sínodo del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla, condena como cismáticos a quienes integran la "Iglesia ortodoxa ucraniana -Patriarcado de Kiev- por atentar contra la Iglesia ortodoxa y sus Sagrados Cánones".
 
Después de la celebración del Concilio y Santo Sínodo del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla, en abril de 2018, se toma la decisión de considerar el tema de la autocefalía de la Iglesia ortodoxa de Ucrania. En junio del mismo año, el patriarca Bartolomé I, cabeza del Patriarcado Ecuménico, declara: Que en 1686, la Iglesia ortodoxa rusa anexionó en forma canónicamente inaceptable a la Iglesia ortodoxa de Ucrania. Y a partir de ese hecho histórico, reconoce la legitimidad de la autocefalía de la Iglesia Ortodoxa de Ucrania.
 
La reacción inmediata de la Iglesia ortodoxa rusa es romper la comunión, de manera definitiva, con el Patriarcado Ecuménico de Constantinopla. La decisión es adoptada en el marco de una reunión del Sínodo celebrada, por primera vez en la historia, en la capital de Bielorrusia, Minsk, presidida por el Patriarca de Moscú y toda Rus, Cirilo I.
 
En octubre de 2018, las tres iglesias ortodoxas que existían en Ucrania deciden unificarse. El 15 de diciembre, en la Catedral de Santa Sofía de Kiev, se celebra el Sínodo Extraordinario de Unificación. Se elige a Epifanio I como Patriarca de Kiev. El 16 de diciembre, por primera vez en la historia, el nombre del Metropolita de Kiev y toda Ucrania se conmemora en la liturgia oficiada por el Patriarca Ecuménico de Constantinopla.
 
El 5 de enero de 2019, en la Catedral de San Jorge en Estambul, el Patriarca Ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I, rubrica la autocefalía de la Iglesia ortodoxa ucraniana en presencia del Metropolita de Kiev y toda Ucrania Epifanio y en, ese entonces, del presidente de ese país Petró Poroshenko. Es cuando las distintas iglesias ortodoxas reconocen la autocefalía de la Iglesia ortodoxa de Ucrania.
 
La tensión entre las iglesias ortodoxas de Rusia y Ucrania es histórica. La rusa siempre ha querido tener sometida a la ucraniana y esta, a lo largo de los siglos, ha luchado por su independencia. En 2018 lo logra, al mismo tiempo que ocurre la unificación de las tres distintas iglesias ortodoxas que existían en el país. Ahora la Iglesia ortodoxa de Ucrania está en plena comunión con el Patriarcado Ecuménico de Constantinopla, pero no la de Rusia.
 

Página 68 de 153