La conferencia mañanera del Presidente Andrés Manuel López Obrador pretende determinar la agenda pública, fijar los temas de conversación en redes sociales y construir un relato cotidiano de la, llamada por él, Cuarta Transformación.
Como ejemplo, la semana pasada, en medio de una crisis de salud, economía y seguridad pública, un reportero de los asistentes a “la mañanera” planteó un tema que seguramente no es una preocupación inmediata de la mayoría de los ciudadanos, pero que llevó un gran espacio en medios, y terminó volviéndose un tema a tratar.
Planteó el reportero: “Usted abrió anticipadamente la sucesión presidencial en marzo cuando dijo: ‘Estoy muy contento porque hay relevo, porque hay de la generación que sigue’. Y, le señaló al Presidente, a modo de pregunta, dicen, que usted tiene un ‘tapado’ o una ‘tapada’.
A lo que, como siempre cargado de referente históricos, López Obrador respondió: “Bueno, lo del ‘tapado’ es del porfiriato, él creó ese modo de actuar en política. El primer tapado que hubo fue su compadre Manuel González.
Porfirio Díaz es el creador del régimen autoritario, que se mantuvo hasta hace poco porque ni la Revolución pudo arrancar de raíz esas prácticas. Porfirio fue el que creó lo del ‘tapado’; Porfirio decidió que la Constitución se iba a respetar en la forma para violarse en el fondo; Porfirio fue el que estableció la regla de que el presidente ponía a los gobernadores, a los diputados federales; y los gobernadores ponían a los presidentes municipales y a los diputados locales.