Oscar Ramírez
El inmueble que albergaba las oficinas aduaneras en Ciudad Juárez, México, y el Paso Texas de los Estados Unidos, se encontraban bastante aseadas, exhibiendo una pulcritud poco usual en esta edificación. El patio central fue cubierto con lámina repujada y con artesonado importado de Francia, se agregaron elementos decorativos como varias pilastras, y se enyesaron las paredes, añadiendo medallones y frescos con representaciones de naturaleza muerta en la parte superior de las puertas, en las partes altas o techos de las estancias se instalaron candiles de vidrio cortado austriaco que mejoraban visiblemente la iluminación y proporcionaba una elegancia, al menos en apariencia al recinto. Era el 16 de octubre de 1909 y se reunían en ese punto fronterizo los entonces presidentes William Howard Taft, por la Unión Americana y Porfirio Días Mori, Por los Estados Unidos Mexicanos, por México se encontraba además el canciller Enrique Creel, abuelo del exsecretario de gobernación durante el mandato de Vicente Fox Quesada; Santiago Creel Miranda. Este acercamiento era en teoría para fortalecer los lazos de cooperación y ayuda mutua, más sin embargo los americanos files a la doctrina Monroe; que establece básicamente el principio “depredador”, ¡de que el continente americano es para ellos!,. Pues bien, bajo ese contexto en esa reunión William Howard Taft, creyendo probablemente que todos los mexicanos éramos como Antonio López de Santa Anna (excelente agente de bienes raíces, que para salvar su vida vendió más de la mitad del territorio nacional , además de ser militar pundonoroso, pues de todos es sabido que se quedó dormido en la crucial batalla de san Jacinto) propuso y casi exigió que nuestra nación dejara de: Comprar armas al entonces Imperio Alemán y que mejor se las compráramos a ellos, permitir la instalación de una base militar en el estado de Baja California, con el fin de coordinar acciones militares para América Latina; detener el proyecto del canal seco de Tehuantepec, ya que representaba una competencia directa para ellos, porque en ese entonces estaban desarrollando el proyecto del canal de Panamá; y la concesión de recursos a empresas estadounidenses, en particular en la extracción de petróleo, pues no consideraban apropiado que el petróleo nacional lo vendiéramos en esa época a la Gran Bretaña; durante el gobierno de Díaz, este le había dado preferencia a las empresas de Lord Whitman Pearson. Porfirio Diaz se negó a cada una de estas peticiones; las noticias de aquella época refieren un marcado disgusto del presidente Taft al terminar y marcharse de la reunión. A partir de ahí la política exterior del vecino país del norte para con México cambio drásticamente. Díaz Mori siempre recelo de los vecinos del norte y manifestaba cada vez que se podía, que nuestra nación se encontraba geográficamente “muy lejos de Dios, y muy cerca de los Estados Unidos”, al año siguiente 1910 nuestra patria iniciaba un periodo de convulsiones sociales, que dio origen a la primera revolución social del siglo XX. Francisco I Madero; opero la insurrección desde territorio americano, y fue financiado en su levantamiento en buena parte por los estadounidenses; ellos los americanos contribuyeron a la caída del régimen de Porfirio Diaz, y cuando ya no les fue útil Madero, coadyubaron también para su desplome y asesinato. Actualmente el Sr. Donald Trump en su afán vanidoso de refrendar a los Estados Unidos como la primera potencia del orbe, ha implantado políticas de tipo fascista; como la de cobrar aranceles a un sin número de productos mercantiles de otros países, incluyendo el nuestro, también ha incrementado notoriamente la deportación de personas que se encuentran en su territorio de manera irregular, por considerarlos delincuentes, sin que haya constancia de ello. Mejor haría el Sr. Trump, en tratar de sanar a los millones de viciosos que se encuentran a lo largo y ancho de los Estados Unidos de Norte América.