Haidé Serrano

La violencia económica hacia las mujeres es una de las violencias menos identificadas y más frecuentes. Según la más reciente Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH), 8 de cada 10 mujeres de 15 años y más dijeron haber sido víctimas de algún tipo de violencia, y el 30 por ciento de ellas señaló haber sido víctima de violencia económica. Sin embargo, pienso que ese 30 por ciento es en realidad porcentaje mucho mayor y que puede alcanzar el 100, dado que las mujeres no saben que han vivido este tipo de agresión numerosas veces y en circunstancias diferentes a lo largo de sus vidas.

La violencia económica es: “Toda acción u omisión del agresor que afecta la supervivencia económica de la víctima. Se manifiesta a través de limitaciones encaminadas a controlar el ingreso de sus percepciones económicas, así como la percepción de un salario menor por igual trabajo, dentro de un mismo centro laboral.” (LGAMVLV, Artículo 6, Fracción IV, 2007).

La razón principal que mantiene a las mujeres en una situación de discriminación y desigualdad es que están confinadas al espacio doméstico, es decir, se encuentran desempeñando tareas del hogar y de cuidados sin recibir ninguna remuneración por este trabajo.

En México, las mujeres dedican 43 horas a la semana al trabajo no remunerado del hogar, en comparación con 15.9 horas a la semana que dedican los hombres; esto es 2.3 veces más que los hombres (México cómo vamos 2021).

En nuestro país, las tareas del hogar y de cuidados alcanzaron un valor económico de 6.8 billones de pesos en 2021.

Esto significa que las mujeres aportaron 2.6 veces más valor económico que los hombres por su trabajo no remunerado.

“Las mujeres no pueden lograr la igualdad en el lugar de trabajo si están en una posición desigual dentro del hogar. Eso implica lograr condiciones equitativas y asegurarse de que el hecho de tener hijos o hijas no impida a las mujeres participar plenamente en la economía y hacer realidad sus esperanzas y aspiraciones”, declaró Carmen Reinhart, Vicepresidenta Sénior y Economista en Jefe del Grupo Banco Mundial.

Aparentemente, cada vez más las mujeres participan de la economía remunerada. Pero si se miran más de cerca las estadísticas, de acuerdo con la ENOE (Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo) del Inegi, en el primer trimestre del 2022, se registró que las mujeres participaron del 45.6% del sector laboral, un indicador que lleva 10 años estacado. Y la razón principal es la desigualdad en los hogares que les impide a las mujeres su pleno desarrollo.

@HaideSerrano dirige y conduce Feminismos en Corto sin Tanto Rollo, una plataforma sobre feminismo, perspectiva de género, igualdad, derechos humanos y paz. Es autora del libro “Mujeres líderes en la pandemia”. Columnista en Luces del Siglo y Milenio. Conductora de Luces del Siglo El Podcast. Licenciada en Comunicación y maestra en Género, Derecho y Proceso Penal.