Rubén Aguilar Valenzuela
El director alemán Florian Henckel von Donnersmarck vuelve a la crónica histórica que desarrolló en su ópera prima, La vida de los otros, y añade una nueva dimensión a esa narrativa con La sombra del pasado (Alemania, 2019).
Ahora cuenta la historia de Kurt un joven artista plástico (Tom Schilling). De niño, en Berlín, asiste con su tía Elisabeth (Saskia Rosendahl) a una exposición organizada por los nazis sobre lo que llaman "arte degenerado". Se impresiona con lo que ve. Su tía lo anima a pintar. Ella le dice una frase que nunca olvidará: "Lo que es auténtico es bello".
Elisabeth sufre un brote psicótico y es trasladada a una institución que dirige el prestigioso ginecólogo Carl Seeband (Sebastian Koch). Aquí se esteriliza e incluso mata a las mujeres enfermas, para eliminar la posibilidad de que puedan contaminar la raza aria.
Termina la guerra y Seeband es encarcelado en la sección de Berlín que controlan los rusos. La mujer del general responsable tiene problemas con su parto. Al ginecólogo nazi lo sacan de la cárcel, para atender el parto y todo sale bien. El general en agradecimiento lo libera y protege.
Kurt trabaja como rotulista en la Alemania oriental. Su jefe ve su talento y lo recomienda, para ingresar a la Academia de Bellas Artes de Berlín que forma artistas que hacen arte "al servicio del pueblo". Allí conoce y se enamora de Ellie (Paula Beer), que cursa diseño de moda. Su padre es el mismo Carl Seeband.
Éste no quiere a Kurt de pareja, para su hija, pero termina por ceder. Le hace abortar con el argumento de que su salud no le permite tener un hijo. Sin que ella se de cuenta la esteriliza.
Kurt se convierte en un artista reconocido. Se le llama de muchos sitios, para hacer murales. Como artista no está satisfecho porque ya no quiere seguir produciendo una y otra vez obras en el marco del realismo socialista.
La pareja se traslada a Berlín Occidental. Ahí de la nada tiene que iniciar un nuevo camino. Se inscribe en la escuela de arte, para relacionarse con las nuevas tendencias artísticas que son desconocidas para él. Ahora tiene que encontrar su propio estilo y abrirse camino.
El personaje de Kurt es basado en la historia del artista alemán Gerhard Richter, quien ha dicho que la película distorsiona su biografía. Ahora es uno de los pintores más reconocidos a nivel mundial.
La película me resultó muy interesante. Antes había visto un documental sobre la obra de Richter y Sybille me había comentado sobre su vida. Y aunque él no reconoce su historia en la película hay claras referencias a su vida.
Son muy buenas las actuaciones de Sebastian Koch, Paula Beer y Tom Schilling. Algunos críticos especializados cuestionan la estructura del guion porque les parece abunda en detalles que son innecesarios, porque ya se conocen y no había necesidad de insistir en ellos.
La sombra del pasado
Título original: Werk ohne Autor
Producción: Alemania, 2019
Dirección: Florian Henckel von Donnersmarck
Guion: Florian Henckel von Donnersmarck
Fotografía: Caleb Deschanel
Música: Max Richter
Actuación: Sebastian Koch, Tom Schilling, Paula Beer, Lars Eidinger, Florian Bartholomäi, Rainer Bock, Oliver Masucci, Hanno Koffler, Ben Becker, Saskia Rosendahl, Ulrike C. Tscharre, Johanna Gastdorf, Pit Bukowski, Evgeniy Sidikhin, Martin Bruchmann, Jörg Schüttauf, David Schütter, Ina Weisse, Chris Theisinger, Antonia Bill, Hans-Uwe Bauer, Johannes Allmayer, Oleg Tikhomirov, Stefan Mehren, Mark Zak, Martin Baden, Matthias Faust, Andreas Nickl, Cai Cohrs, Viktor Bleischwitz