Rubén Aguilar

Barcelona, España

Historia

En 1877 se construye la casa con diseño de Emili Sala Cortés, uno de los maestros de Gaudí. En 1900 la adquiere el matrimonio de Josep Batlló y Godo Amalia Belaunzarán, de la familia que funda el periódico La Vanguardia. En 1904 contratan a Gaudí, para remodelara.

Le dan toda la libertad porque querían que su casa fuera algo único. La obra se termina en 1906. Los hijos del matrimonio vivieron aquí hasta la mitad de los cincuenta. Tuvo varios dueños y en 1993 los actuales propietarios se hicieron de ella.  

La remodelación

Gaudí cambió totalmente la fachada, el piso principal, que se convirtió en la residencia de la familia Batlló, amplió el pozo central con el fin de suministrar luz a todo el edificio y también añadió nuevas plantas. En esta obra colaboraron Domènec Sugrañes i Gras, Josep Canaleta y Joan Rubió.

Estilo   

Es naturalista. Gaudí tiene la intención de evitar las líneas rectas. Gran parte de la fachada está decorada con un mosaico de azulejos de cerámica rotos (trencadís) que se inicia en tonos de naranja dorada y se trasladan a los azules verdosos. El techo se arqueó y asemeja el lomo de un dragón o dinosaurio.  

Exterior

  • La fachada

Tiene tres secciones que se integran armónicamente. La parte central evoca la superficie de un lago con nenúfares. Es una superficie ondulante cubierta de fragmentos de yeso con los discos de vidrio de color combinado, que fueron diseñados por Gaudí y Jujol, mientras trabajaban en la restauración de la Catedral de Palma. Los balcones de hierro fundido son un elemento central de la fachada.

Destaca la tribuna del piso principal, el de la familia, que se extiende por los laterales hasta el primer piso y alcanza 10 metros de altura. Presenta cinco vanos cubiertos con vidrieras policromas, y sostenidos por ocho columnas de forma ósea. El friso de la tribuna remata en motivos escultóricos de forma vegetal.

Forman parte de la fachada una torre con una cruz de cuatro brazos orientados a los puntos cardinales. Hay una segunda estructura en forma de bulbo de manera similar a una flor de tálamo. Es una cruz con brazos que anuncian los brotes de la próxima floración. La torre está decorada con los monogramas de Jesús y María.

El edificio presenta una fachada posterior que da al patio interior de la manzana, de igual forma ondulante y recubierta de trencadís de cerámica. El piso principal tiene un patio que sobresale del cuerpo del edificio, al que se accede por el comedor de la vivienda. El resto de pisos tienen terrazas que dan a la parte posterior del edificio, cubiertas con barandillas de reja metálica. Destacada el desván, realizado con cerámica de vivos colores, con motivos florales y geométricos.

  • Remate

El edificio remata en una corona, que es parte de la fachada, que está en el mismo nivel que el techo. El perfil recuerda la columna vertebral de un dragón con azulejos de cerámica y una pequeña ventana triangular hacia la derecha de la estructura simula el ojo.  El trabajo de azulejos es de los Talleres Sebastià Ribó.

Interior

  • El vestíbulo

Es de forma rectangular y techos curvos, con suelo de mármol y una decoración de cerámica azul en la parte baja de la pared y de estuco en la superior. Esta zona fue reformada en los años 1990, en que se reconvirtió la cochera en un espacio polivalente para reuniones y convenciones.

  • Patio central

Gaudí lo amplía, para conseguir mayor luz y ventilación. Lo cubre una claraboya de cristal revestida de azulejos, con una graduación de color que va desde el azul de la parte superior hasta el blanco de la inferior. Esto, para un mejor aprovechamiento de la luz, lo que provoca la sensación de estar en una cueva submarina. Tiene un total de 32 ventanas, con un doble diseño, una parte superior para la entrada de luz y unas rendijas inferiores para la ventilación.

  • La planta de la familia

Se accede a través de un hall que utiliza claraboyas que asemejan caparazones de tortuga y paredes abovedadas de formas curvas. Gaudí diseña el mobiliario y los diversos elementos decorativos. El espacio más relevante es el salón principal, con techo de cielo raso de formas helicoidales en relieve, donde destaca el gran ventanal que da al Paseo de Gracia, decorado con vidrieras en forma de disco de diferentes colores. El mobiliario original diseñado por Gaudí se conserva en la Casa-Museo Gaudí del Parque Güell.

  • El desván

La última planta es el desván donde estaban los lavaderos y las zonas de servicios. Actúa como cámara aislante para las viviendas, protegiéndolas de las rigurosidades del clima. Se concibe como una estructura diferenciada del resto del edificio. Tiene una serie de arcos realizados en ladrillo revocados con yeso, que sostiene un sistema de bóvedas parabólicas sobre el que se alza la azotea, solución que Gaudí utilizó después en la Casa Milá. 

  • La azotea

 

Gaudí concibió este espacio de forma funcional y estética, para situar las salidas de humo y de la ventilación. Los elementos están elaborados de forma artesanal con plasticidad escultórica. En la azotea se encuentra un segundo desván más pequeño que el de la planta inferior, alojado en el lomo del dragón, que contiene el tanque de agua que abastece el edificio. En la azotea hay 27 chimeneas dispuestas en cuatro grupos y con una altura de 6.10 metros.

Comentarios

Aquí están ya todos los elementos de la arquitectura orgánica que van a caracterizar la obra de Gaudí. Los trabajos en esta casa van de 1904 a 1906. La fachada es un derroche de imaginación. Está concebida como una gran escultura. Cada detalle está cuidado. El arquitecto diseña el mobiliario y todos los elementos decorativos. Es un gran obra de arte. Al terminar esta remodelación inicia el proyecto de la Casa Milà.