Francisco Tobías

Las fiestas navideñas son un momento para conmemorar la felicidad, la alegría, para buscar la paz y el amor, para quienes somos creyente es la conmemoración de la llegada del hijo de Dios. Sin embargo, la economía, que pareciera encontrarse en todos los lugares y épocas, también tiene una participación importante.

Durante las fechas navideñas la actividad económica se dispara, para el 2023, en México se calculó una derrama económica mayor a los 600 mil millones de pesos, durante las tres festividades, las cuales son: navidad, año nuevo y día de los reyes magos. El consumo de las familias mexicanas aumenta 27 por ciento, debido a los regalos y cenas navideñas. Estos mismos estudios, desarrollados por el Tecnológico de Monterrey, señalan que las mercancías más compradas son: ropa, alimentos, decoración y bebidas alcohólicas.

Las ventas de los minoristas, en muchos países mundo, se incrementan, de hecho, la navidad se ha convertido en una festividad muy importante para la economía capitalista, ya que además de las compras “tradicionales” navideñas, hay un incremento en viajes y actividades tanto de ocio como de diversión, generando además de la satisfacción de necesidades que las inversiones aumenten. 

Además del aumento en las ventas existe un incremento en la contratación de personal, aunque sea temporal, cerca de 30 mil mexicanos tienen un empleo durante el mes de diciembre, gracias a las ventas navideñas.

Y es lógico que las compras aumenten de manera enorme durante diciembre, siendo el mes en el cual la mayoría de los trabajadores mexicanos recibimos, ingresos “extraordinarios” como lo son los aguinaldos, las primas vacaciones, tandas, fondos de ahorro y más.

Es cierto que la emoción de obsequiar, la alegría de regalar, el gusto por una cena deliciosa con la familiar, son satisfactores importantes, sin embargo, tenemos que ser cautelosos y moderados pues a la vuelta de la esquina se encuentra enero y su cuesta, la cual pareciera que cada vez tiene una mayor pendiente, ocasionando que su recorrido sea lento y pesado.

Mi tres preciosas princesas mágicas; RBK, MLK y MJ; y yo les deseamos una navidad llena de amor, fraternidad, salud, felicidad y prosperidad.

¡Feliz navidad!