Fracisco Tobías

Muchas noticias o comentarios respecto al empleo incluyen información sobre la informalidad en el trabajo. Pero, a qué se refiere la informalidad laboral, incluso tendríamos que dar una explicación de lo que es el trabajo.

Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el trabajo es el “conjunto de actividades humanas, remuneradas o no, que producen bienes o servicios en una economía, o que satisfacen las necesidades de una comunidad o proveen los medios de sustento necesarios para los individuos”. Desafortunadamente no todos los empleos son formales, en México este tipo de empleos son en los cuales el trabajador, quien es fundamental en cualquier proceso productivo, además de contar por lo menos con un salario mínimo de acuerdo con la ley, cuenta con seguridad social, para así satisfacer necesidades básicas e importantes como el acceso a la salud ya sea mediante el IMSS o ISSSTE, acceso a créditos para la vivienda por medio del INFONAVIT y para contar con un ahorro para el retiro. Cuando estos requisitos no se cumplen el trabajador se encuentra en la informalidad.

La informalidad en el trabajo se puede dar por dos motivos, uno de ello es el autoempleo, el ejemplo más claro son los plomeros o electricistas que trabajan por su cuenta, sin embargo, existen un sinfín de trabajos que parecieran formales sin serlo. El otro motivo son aquellos trabajadores que son contratados, pero no se les brinda un salario mínimo, como lo marca la ley o bien no se le brinda seguridad social, un ejemplo de ello son las trabajadoras domésticas.

Debemos de entender que el trabajador que participa en el mercado laboral informal es orillado a ello para poder tener un ingreso monetario y con ello dar sustento a su persona y familia. Esto a pesar de las pérdidas que le son ocasionadas al mismo trabajador, así como a la sociedad y a la economía.

La informalidad laboral tiene grandes alcances en la economía, sólo para darnos una idea en el año 2018 según la OIT, 2 mil millones de trabajadores se encontraban en la informalidad, es decir cerca del 60 por ciento de los trabajadores del mundo entero, tenían un empleo informal, y por si fuera poco 8 de cada 10 empresas en el mundo eran informales. Según datos de esa misma organización en el 2022 Bélgica fue la economía con la menor tasa de informalidad con tan sólo 2.9 por ciento, mientras que Rwanda tenía el 86.8 por ciento de sus trabajos dentro de la informalidad. En nuestro país la tasa de informalidad para el 2022 era de 54.85 por ciento, es decir que poco más de mitad de los trabajadores mexicanos, que trabajamos en territorio mexicano, se encuentran en una situación de informalidad.

La importancia de la formalidad laboral es antes de toda la gran posibilidad de abandonar la pobreza por parte del trabajador y de sus dependientes, además la formalidad da la oportunidad a las empresas para crecer, así como acceder a programas gubernamentales y a créditos. Para los gobiernos con la formalidad laboral se genera una mayor recaudación tributaria la cual ayudaría a invertir en mejoras sociales, de infraestructura y hasta en programas para microempresarios.

El único motor que existe para generar crecimiento y desarrollo económico es el trabajo, cuando éste no es legal además de no cubrir las necesidades del trabajador le pone un freno a la propia economía.

Desafortunadamente la inmensa mayoría de quienes participan como trabajadores en la informalidad laboral no logran salir de la pobreza, por ello es importante que los tres niveles de gobierno desarrollen y apliquen políticas públicas que logren la formalización del empleo.