Francisco Tobías

FitchRating es una empresa norteamericana que se dedica a calificar la capacidad crediticia de empresas y gobiernos, mediante datos cuantitativos y cualitativos logra medir que tan confiables son estos entes, ya sean los gobiernos o las empresas, para realizarles algún tipo de crédito. Algo “semejante” al buró de crédito en México.

Desde 1924 FithRating ha utilizado una escala alfabética para calificar a sus clientes, dividida en dos grandes bloques el primero es con grado de inversión siendo estas las AAA, AA+, AA y BBB, el segundo bloque nada deseable es conocido como bono basura, siendo sus calificaciones alfabéticas BB, B, CCC, CC, C, D y NR.

Los gobiernos pueden hacerse de recursos monetarios por medio de la solicitud de crédito, por medio de los llamado bonos, con lo cual un individuo o empresa puede adquirirlo con el compromiso de parte del gobierno de devolverle en cierto tiempo el valor de bono más un interés. De hecho, es una fuente muy fuerte de financiamiento para la mayoría de los gobiernos, por ejemplo, México en enero de este año vendió bonos por un monto de 4 mil millones de dólares, a plazos de 5 y 12 años con tasas de interés del 5.4 y 6.35 por ciento respectivamente.

El gobierno de los Estados Unidos antes de junio de este año tenía autorizado un endeudamiento máximo de 31 mil 400 millones de dólares, el 3 junio el presidente Biden firmó, con autorización de las dos cámaras, un aumento en el techo de endeudamiento, de no haberlo hecho la economía más grande del mundo hubiera caído en un “default”, es decir en un impago de su deuda lo que hubiera ocasionado una crisis económica no sólo en ese país sino en el mundo entero.

Aunado a esta política del crédito público norteamericano, con el deterioro fiscal de ese mismo país, más el incremento del gasto de su gobierno, la calificadora FitchRaiting bajó la calificación crediticia al gobierno de los Estados Unidos de AAA a AA+. Por supuesto que las autoridades del tesoro y de la Casa Blanca de forma inmediata salieron a los medios descalificando la calificación que se había emitido.

Sin embargo, el dólar norteamericano es y seguirá siendo la divisa más deseada del planeta incluso por increíble que fuera, incluso si hubiera un nerviosismo generalizado en el mercado mundial, los inversionistas recurrirían al dólar como divisa segura. Por otro lado, la economía norteamericana seguirá creciendo y siendo la más grande del orbe, el 2022 su PIB fue de caso 25 trillones y medio de dólares y se estima que en 2023 crezca entre un 1 y 1.2 por ciento.

En ocasiones las malas calificaciones no son un reflejo de la realidad, pues sólo basta recordar que la segunda persona más inteligente que ha pisado la tierra, Albert Einstein, reprobó historia, geografía y lenguas.