Lo mataron con el hacha

Francisco Tobías 

 

En esta ocasión te platico sobre un hecho que estremeció a todo Saltillo, villa aún, allá por el año de 1665, cuando don Vicente de Voz Mediano encontró la muerte de manera violenta.

A don Vicente se le consideraba como “una persona de buen entendimiento”. Bueno, eso lo decía el capitán Alonso de León, apodado “El Mozo”, quien fundara la Villa de Santiago de Monclova, hoy Monclovita La bella, pero volvamos al caso. El occiso se localizó en una acequia lejos de su casa: había sido asesinado con un certero hachazo en la cabeza. Las primeras sospechas recayeron sobre los vecinos más próximos de la acequia, quienes fueron aprehendidos por el alcalde mayor de la villa.

Los habitantes estaban confundidos, no sabía nadie qué había pasado, pero cuando regresaron al lugar de los hechos las autoridades se dieron cuenta de que había un rastro de sangre. Gotas que guiaban de dónde venía el cuerpo de don Vicente, y al seguirlas se percataron que llegaban al mismísimo domicilio del muertito.

Al reparar en ello aprehendieron a su esposa e hija, las cuales negaron al principio los hechos, pero después de arduos interrogatorios terminaron aceptando la ejecución de tan abominable homicidio.

Las dos mujeres narraron que lo habían planeado. Esperaron el momento de la cena para darle un certero hachazo en la cabeza a don Vicente, quien al no poder reaccionar, al poquito tiempo murió. Las “damas” esperaron a que entrara más la noche para llevar el cuerpo lejos de casa, donde fue encontrado y así confundir a todos, incluyendo a las autoridades.

Ellas alegaron malos tratos y vida infeliz al lado de Vicente, lo que no les valió ante la autoridad para alcanzar la libertad.

Así es, señoras y señores, aquel Saltillo antiguo se vio entristecido y ensangrentado por el asesinato de un hombre de “muy buen entendimiento”, una anécdota que la verdad no es para presumir, pero sí para recordar.