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La fuerza del voto retrospectivo 

El presidente Andrés Manuel López Obrador se ha propuesto convertir las elecciones presidenciales del 2024 en una especie de plebiscito. Su objetivo: obtener un apoyo masivo del pueblo a la causa de la llamada Cuarta Transformación.

Por supuesto que los procesos electorales son también una evaluación del gobierno en turno y de su partido. El elector hará un análisis de lo prometido y lo cumplido por su gobernante. Así como la expectativa contrastada con su realidad, los resultados reflejados en su vida cotidiana.

Por ello, y para brindarles elementos para que cada quien haga su análisis personal e incluso familiar,  deseo en este envío recordar que en su primer discurso, ya como virtual ganador de la contienda presidencial, Andrés Manuel López Obrador, en primer lugar, llamó a todos los mexicanos a la reconciliación y a poner por encima de los intereses personales, por legítimos que sean, el interés general. Y citó a nuestro héroe Vicente Guerrero: "La patria es primero".

Afirmó que el nuevo proyecto de nación buscaría establecer una auténtica democracia. "No apostamos a construir una dictadura abierta ni encubierta. Los cambios serán profundos, pero se darán con apego al orden legal establecido. Habrá libertad empresarial; libertad de expresión, de asociación y de creencias; se garantizarán todas las libertades individuales y sociales, así como los derechos ciudadanos y políticos consagrados en nuestra Constitución".

El Presidente envió también un mensaje de calma y serenidad a los mercados y fue muy claro al señalar que en "materia económica, se respetaría la autonomía del Banco de México; el nuevo gobierno mantendría disciplina financiera y fiscal; se reconocerían los compromisos contraídos con empresas y bancos nacionales y extranjeros".

Respecto a los contratos del sector energético suscritos con particulares, señaló que serían revisados para prevenir actos de corrupción o ilegalidad. "Si encontráramos anomalías que afecten el interés nacional, se acudirá al Congreso de la Unión, a tribunales nacionales e internacionales; es decir, siempre nos conduciremos por la vía legal". Y mostró su respeto hacia la propiedad privada afirmando: "No actuaremos de manera arbitraria ni habrá confiscación o expropiación de bienes", poniendo fin incluso a los temores de alguna clase media que creían que les iban a quitar su casa propia para dársela a los pobres.

Además, estableció como la misión principal del nuevo gobierno, erradicar la corrupción y la impunidad. "La transformación que llevaremos a cabo consistirá, básicamente, en desterrar la corrupción de nuestro país. No tendremos problema en lograr este propósito porque el pueblo de México es heredero de grandes civilizaciones y, por ello, es inteligente, honrado y trabajador". En su diagnóstico, "la corrupción no es un fenómeno cultural sino el resultado de un régimen político en decadencia. 

Estamos absolutamente seguros de que este mal es la causa principal de la desigualdad social y económica y de la violencia que padecemos". 

En cuanto a su visión del desarrollo social, López Obrador fijo algunas líneas de acción como las siguientes: "Bajará el gasto corriente y aumentará la inversión pública para impulsar actividades productivas y crear empleos. El propósito es fortalecer el mercado interno, tratar de producir en el país lo que consumimos y que el mexicano pueda trabajar y ser feliz donde nació, donde están sus familiares, sus costumbres, sus culturas; quien desee emigrar, que lo haga por gusto y no por necesidad".

El Estado, señaló, dejaría de ser un comité al servicio de una minoría y representaría a todos los mexicanos: a ricos y pobres; a pobladores del campo y de la ciudad; a migrantes, a creyentes y no creyentes, a seres humanos de todas las corrientes de pensamiento y de todas las preferencias sexuales. 

Escucharemos a todos, atenderemos a todos, respetaremos a todos, pero daremos preferencia a los más humildes y olvidados; en especial, a los pueblos indígenas de México. Por el bien de todos, primero los pobres".

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Notas migratorias y otras cuestiones en el ambiente electoral

Estados Unidos está por dar a conocer cambios en sus políticas migratorias y se prevé que sean cambios duros. ¿Qué se sabe, por parte del Gobierno de México, de este tema?, interrogó la periodista al presidente Andrés Manuel López Obrador, en la mañanera del pasado primero de febrero.

Pues “nada más la propuesta que hizo el presidente Biden de cerrar la frontera en caso de que haya mucho flujo migratorio, eso se lo propuso a los republicanos”, respondió el presidente, y continuó:

“Nosotros respetamos mucho esa decisión, le tenemos mucho afecto al presidente Biden, nada más que es más de lo mismo, no quieren ir al fondo, se quedan por encimita, es lo que hacen cada vez que hay elección, lamentablemente de un partido o de otro, usan el tema migratorio y el tema de las drogas.”

“Pero, imagínense, como lo planteaba yo en el caso de mi amigo el expresidente Donald Trump cuando me plantea que va a construir el muro y que va a usar dinero de las comisiones que se cobran por el envío de dinero, por las remesas, con ese propósito.”

“Estamos hablando por teléfono y le contesto: Con todo respeto, presidente, pero eso no es solución. Le voy a mandar—le dije— un video de un túnel que va de Tijuana a San Diego. Y así como ese túnel, hemos encontrado cerca de 10; pero no crean que cualquier túnel, no, bien hecho, hasta en la línea divisoria abajo, una alambrada y hasta banderita de un país y del otro. Y como tiene sentido del humor, pues ya no me volvió a tocar el tema del muro, y lo que hizo fue reírse. Dijo: ‘Con usted no puedo’.”

“O sea, pues sí, está bien que engañen a los que son susceptibles de manipulación, pero como con muros se va a resolver un problema migratorio.”

“Pero, además, son tres mil 200 kilómetros de frontera. ¿Por qué no mejor se atienden las causas de la migración, se apoya a los países pobres para que la gente no se vea obligada a emigrar? La gente no sale de sus pueblos, no abandona a sus familiares por gusto, lo hace por necesidad.”

“¿Y por qué se ayuda con gasto bélico miles de millones de dólares en las guerras y no pueden destinar recursos para el progreso, para el bienestar de los pueblos pobres?”.

Pero, independientemente de eso, “siempre hubo con el presidente Trump muy buena relación, muy buena relación.” Aclaró López obrador y señaló después: “Ahora el presidente Biden por las mismas circunstancias dice: ‘Cerramos la frontera’. Imagínense lo que es cerrar la frontera. ¿Cuánto tiempo puede durar cerrada la frontera? O sea, nos perjudica a los dos países. Pero no es una opción, una alternativa”.

“Todo porque hay elecciones y entonces están por la aprobación de presupuesto, necesitan los votos de los republicanos y ellos, sobre todo el gobierno de Texas presiona muchísimo. Ese señor, el gobernador de Texas, con todo respeto, es antimexicano, se olvida de que Texas era de México y pone alambradas, y tiene una política antinmigrante y en contra de los que por necesidad tienen que ir a buscarse la vida a Estados Unidos; pero muy inhumano, yo diría muy insensible y muy oportunista, porque eso es politiquería. Entonces, están metidos en eso.”

En este marco de procesos electorales en ambos países, Estados Unidos y México, surgió otro tema que en esa misma mañanera abordó el presidente.

Así lo planteó López Obrador: “Este periodista que sacó el reportaje de que yo estoy metido en el narcotráfico o que me dieron dinero para la campaña sin presentar una sola prueba, periodista famoso, de los premiados. Para mí, deberían de darle el premio a la calumnia. Es un mercenario al servicio de la DEA. ¿¡Pero cómo va a calumniar impunemente!? ¿¡Cómo va a hacer un reportaje sin presentar pruebas!?

Afirmó el mandatario, “él es un peón, un mercenario del periodismo, como los hay en México, los hay en Estados Unidos y en todo el mundo, pero eso tiene que ver con el Departamento de Estado, porque tampoco es la DEA así, en abstracto. ¿Qué, no tienen información en el Departamento de Estado, en el Departamento de Justicia?”

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AMLO, Zedillo, Salinas y la paternidad del neoliberalismo mexicano

El expresidente (1994-2000) Ernesto Zedillo regresó a México para participar como orador en un evento de Actinver, una empresa financiera.

Oportunidad para que el presidente Andrés Manuel López Obrador criticara la política que implementó Zedillo durante su gobierno y lo invitara a responderle cuatro preguntas sobre ello.

“Ahora que viene Zedillo, me gustaría hacerle tres preguntas:

Una: ¿Por qué convirtió las deudas privadas de unos cuantos en deuda pública, el Fobaproa?

Porque lo traen de expositor, como Aznar, de España, todo este bloque conservador; que conteste eso.

Lo segundo, que conteste ¿por qué envió al Congreso una reforma de pensiones en donde el trabajador al jubilarse no va a recibir —sino se hubiese modificado, porque ya se hizo un cambio y se va a hacer otro, de esa reforma—, no iba a recibir ni el 50 por ciento de su salario? ¿Qué lo llevó a dañar a los trabajadores? ¿Por qué lo hizo? ¿No sabía lo que iba a significar esa reforma a las pensiones? ¿Hicieron mal el cálculo, la corrida financiera? Esa sería la segunda, que explicara.

Una tercera es: ¿Por qué durante su gobierno no aumentó el salario mínimo, sino, al contrario, se redujo el poder de compra del salario?

Dije tres, pero tengo muchas más, va la cuarta.

¿Por qué desapareció los trenes de pasajeros y se fue a trabajar de asesor a la empresa estadounidense que le entregó los ferrocarriles nacionales?

Ahora estamos buscando revertir todo eso. Lo que voy a presentar el día 5, en esencia, es el regresar el espíritu y la letra a la luz de los nuevos tiempos de lo que fue la Constitución original de 1917, eso es lo que voy a plantear: que la Constitución del 17 vuelva a ser una Constitución que garantice las libertades, la democracia y, sobre todo, la justicia social.

Porque lo que más se vulneró en el periodo neoliberal fue lo relacionado con la justicia social. Se entregaron las tierras ejidales, es decir, se privatizó el ejido, se abandonó el campo, se afectó a los trabajadores con salarios muy bajos, se le quitaron prestaciones. Esto del reparto de utilidades ya no existía, esto lo creamos nosotros. 

¿Qué hicieron más?

Se evitó la contratación de los trabajadores, la basificación de los trabajadores. Se estableció la subcontratación, el outsourcing, el poder contratar a un trabajador por hora, no pagarles o no reconocerles prestaciones sociales, laborales, pero es bastante el rezago.”

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