Gerardo Moscoso Caamaño

Los temperamentos necios con iniciativa y decisión, son aquellos osados que no saben que no saben; entre otras razones, porque ese vacío que sienten está ocupado por una espesa nata, por una densa masa de temáticas pedestres, de trivialidades, convicciones sin fundamento y otros materiales de desecho.

El hecho de que la seguridad de este tipo de personalidades necias llame la atención es que uno supone que estos personajes deberían experimentar algo parecido al pudor retraído, porque el problema de nuestros estúpidos de hoy, (casi iguales a los de siempre), no es que no se den cuenta de la cantidad de información y conocimientos que no tienen, sino porque atribuyen un valor equivocado tanto a lo que ignoran como a lo que creen saber. No solo porque consideren que esto se encuentra al mismo nivel de lo que desconocen.

Frecuentemente estos sicópatas consideran que la persona más ilustrada, leída o refinada es alguien que les está robando foco, y que además, no pertenecen a su estatus social. Mientras que para ellos lo real desfila ante sus ojos de una manera simple, e insustancial, en el terreno de la élite cultural, sin duda dirían: los “pelados” con un concierto escuchado de música clásica, escuchados todos”, no distinguen a Tchaikovski de la Sonora Dinamita, etcétera. La equivocada valoración que realizan de cuanto desconocen, es porque lo prudente es mucho más rico de lo que estos temerarios oportunistas alcanzan a vislumbrar. Pero para acceder a dicha riqueza se requieren determinadas herramientas y destrezas que son las que, precisamente, proporciona ese tesoro heredado que denominamos verdadero conocimiento. Lo cierto es que este tipo de personalidades protagónicas, ricas, pero no ilustradas, no ven lo que existe, que pasa por delante de sus ojos sin que sean capaces de discernimiento. En otras palabras, la persona cultivada no solo dispone de un mundo interior más rico, sino que no se emborracha con los licores de la estupidez, la envidia y la avaricia.

Los temperamentos necios, dije antes que no saben que no saben, lo que significa que lo que de veras no saben es lo que pierden. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.